Pinar nació como una empresa familiar para generar empleo en el municipio y ayudar a la conservación del medio ambiente.
Luz Piedad Tabares y su familia, son el reflejo de la destreza y el talento que caracterizan a los artesanos pensilvenses, quienes vieron en los retales de los aserríos del municipio, una oportunidad de negocio.
En el 2014 crearon su empresa familiar el Pinar, qué con amor, dedicación y respeto por el medio ambiente, transforma la madera en juguetes únicos y coloridos, cuidando cada detalle para el deleite de sus clientes.
Pinar por medio de sus juguetes artesanales quiere inspirar la diversión y evocar con ternura los tiempos antiguos, invitando a cambiar los juguetes de plástico por los juegos tradicionales de madera.